El catalejo: una historia familiar tejida sobre la trama de la memoria
Luego de la partida del nono, la familia se vuelve un caos. El catalejo que tuvo entre sus manos durante sus años de croto, ahora se disputa entre Angélica, su esposa, Gloria, su hija, y sus dos nietas, Florencia y Pipi. “El catalejo”, escrita y dirigida por Fernanda Marino, tuvo su última función el sábado 27 de mayo (2019) en el teatro Te.ne.as, Neuquén.
Una historia de amor y conflicto revestida por comedia. La disputa por el catalejo del nono reabre las heridas del pasado, y desata días y noches de reproches familiares velados por la presencia del abuelo en alma. Entre dimes y diretes, bañados de un tinte humorístico, la grieta familiar se agudiza y el pasado se vuelve presente.
Una cortina de tul en el centro del escenario rompe con el orden cronológico y nos lleva a revivir recuerdos de antaño de Galileo, el nono, que nos ayudan a comprender el hoy. Su nieta Florencia, al margen de la indiferencia de su abuela y su madre por el pasado oculto del nono, decide investigar por mano propia sobre sus aventuras y comienza a encaminarse hacia un destino inesperado.
La música, la iluminación y la escenografía de la obra sumergen por completo a la audiencia en la historia y convierten la trama en algo atrapante. Escena tras escena los intérpretes Claudio Ferreto, Carolina Sancho, Silvina Feliziani, Florencia Belloro, María Jaramillo Herrera, Fernando Rodríguez y Juan Fontana golpean, petrifican y regocijan las emociones del público. Los diálogos, divertidos y chocantes, dejan entrever la creatividad de la dramaturga y directora de la obra, Fernanda Marino.
“El catalejo” cuenta la historia de una familia como pocas, tejida sobre la fina trama de la memoria, donde alguien se va, alguien se queda y alguien vuelve.